Hoy conmemoramos un nuevo aniversario de la Declaración de la Independencia, ese 9 de julio de 1816 en el que los pueblos de nuestro territorio decidieron romper definitivamente los lazos de dominación colonial para construir un destino propio.
Aquellos congresales reunidos en Tucumán asumieron el compromiso histórico de proclamar la independencia, no sólo como un acto jurídico, sino como un gesto político y colectivo que exigía unidad, coraje y visión de futuro.
La independencia no fue un hecho aislado ni terminado. Fue el inicio de un proceso que sigue vigente cada vez que discutimos qué modelo de país queremos. Fue la afirmación de la soberanía, la igualdad y la justicia como valores centrales.
Para las y los trabajadores judiciales, esta fecha nos convoca a reflexionar sobre la necesidad de una justicia verdaderamente independiente, accesible y comprometida con los derechos de todas las personas. Nos recuerda que la libertad no existe sin igualdad ni sin dignidad para el pueblo.
A más de dos siglos de aquel día, reafirmamos nuestro compromiso con los valores de la independencia: la construcción colectiva, la unidad en la diversidad y la defensa de los intereses del pueblo trabajador.
Feliz Día de la Independencia Argentina.